No hay guerra ni transición verde que importen; el consumo global de energía y combustibles fósiles está destinado a alcanzar un nivel récord en 2024.
Así lo destaca el último report de la Economist Intelligence Unit (EIU), que muestra que el consumo mundial de energía crecerá un 1,8% el próximo año, especialmente gracias a la fuerte demanda asiática. A pesar de los altos precios y las interrupciones en el suministro de energía, el report muestra que la demanda de petróleo crudo y gas natural aumentará en 2024.
El mundo consume cada vez más petróleo, gas natural y carbón
Se espera que la demanda de petróleo por sí sola crezca un 1,7% en 2024, mientras que la de gas natural crecerá un 2,2%. La expansión de la demanda estará liderada por Asia y Oriente Medio. Por el contrario, en Europa la demanda se verá deprimida. Considerándolo todo, la demanda de combustibles fósiles alcanzará niveles récord.
Según las últimas proyecciones de la OPEP, el consumo mundial de petróleo aumentará en 2,4 millones de barriles por día este año (nuevo máximo histórico) y en otros 2,2 millones de barriles por día el próximo año. Se prevé que la demanda mundial de petróleo alcance un promedio récord de 102,1 millones de barriles por día en 2023, impulsada por una mayor demanda en países no pertenecientes a la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos).
Pero el pico de consumo de fósiles llegará en 2030
A principios de este año, la Agencia Internacional de Energía (AIE) dijo que la demanda mundial de carbón también se mantendrá en niveles sin precedentes. También según la AIE, la demanda mundial de petróleo, gas natural y carbón alcanzará su punto máximo antes de 2030.
Naturalmente, la aproximación de un pico plantea problemas importantes en términos de inversiones para mantener o ampliar las instalaciones de extracción y producción. De hecho, la proximidad de un pico desalienta a quienes quieren invertir y hace que la oferta se contraiga justo cuando la demanda avanza hacia el pico. La consecuencia natural es un aumento de los precios.
La EIU prevé que la demanda de energías renovables también crecerá en 2024, con un incremento del 11%.
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