Durante el último año, los precios spot del gas se han duplicado a nivel mundial, mientras que las reservas en los principales mercados de consumo han alcanzado sus niveles más bajos en años. Este escenario augura una temporada de abastecimiento particularmente difícil para 2025.
El drástico aumento de los precios está llevando a los productores de electricidad a cambiar a otros combustibles, mientras que las industrias de alta intensidad energética en Europa y los utility más sensibles a los precios en el sur y sureste asiático están reduciendo el consumo cuando es posible.
Reservas en fuerte contracción
Las reservas combinadas de la Unión Europea, Reino Unido, Ucrania y Estados Unidos son 400 teravatios hora (TWh) inferiores en comparación con el mismo período del año pasado, lo que equivale a 1.446 billones de pies cúbicos o 32 millones de toneladas de gas natural licuado (GNL).
Desde el segundo trimestre de 2024, el consumo de gas ha crecido más rápido que la producción. Entre las principales causas se encuentran el aumento record de la generación eléctrica a gas, la reducción de las actividades de perforación en Estados Unidos, un invierno más riguroso en América del Norte y el noroeste de Europa, y las sanciones impuestas a Rusia.
Como resultado, las reservas acumuladas durante el invierno templado de 2023/24 se agotaron completamente en el transcurso del invierno 2024/25. Sin embargo, el rápido vaciado de las reservas no es sostenible, y los precios han subido drásticamente para contener el consumo y estimular la recuperación de la producción.
Precios en fuerte aumento en los mercados globales
Los future con vencimientos cercanos han registrado los mayores incrementos para preservar las reservas restantes y limitar el consumo durante el verano de 2025, con el objetivo de reconstituir las existencias de cara al invierno 2025/26. En América del Norte y el noroeste de Europa, los precios de los future se han duplicado en el último año, mientras que en el noreste asiático han aumentado un 75% en comparación con el mismo período de 2024.
Con Estados Unidos, la Unión Europea, Ucrania y Japón centrados en reponer rápidamente las reservas durante el verano de 2025, la competencia por el gas en los próximos ocho meses será intensa.
Las industrias de alta intensidad energética en Europa y los compradores más sensibles a los precios en el sur y sureste de Asia corren el riesgo de quedar fuera del mercado, como ocurrió en el verano de 2022 tras el inicio de la guerra en Ucrania. Si una ola de calor persistente golpea las regiones mencionadas, el aumento de la demanda energética para refrigeración podría agravar aún más la crisis.
Inversores y especuladores apuestan por el alza del gas
Los inversores financieros ya han apostado por un verano de tensiones en el mercado del gas, acumulando posiciones alcistas record mediante future y opciones. En América del Norte, los fondos de cobertura han acumulado posiciones netas largas equivalentes a 2,975 billones de pies cúbicos, el valor más alto en más de tres años. En el noroeste europeo, los fondos de inversión mantenían a inicios de febrero una posición neta larga casi récord de 292 TWh, vendiendo posteriormente 34 TWh en la segunda semana del mes para obtener beneficios.
La compra masiva de gas por parte de los fondos de inversión ha exacerbado la escasez en el mercado, acelerando la escalada de precios y forzando un cambio prematuro a combustibles alternativos como el carbón y el petróleo, además de provocar más cierres industriales.
Ante otro año de precios elevados para hogares y empresas, los políticos europeos podrían culpar a los hedge fund y especuladores, como suele ocurrir en momentos de fuertes subidas. No obstante, la realidad es que el mercado global estará mucho más ajustado este verano en comparación con 2024 y 2023. Por ello, el aumento de precios será necesario para reequilibrar la oferta y la demanda, contener el consumo e incentivar la recuperación de la producción.
METALLIRARI.COM © ALL RIGHTS RESERVED