Mientras en Europa nos abruma la crisis del gas natural que cambiará para peor la vida de millones de personas, nos esperan muchas otras consecuencias desagradables de la guerra que libran Rusia y Occidente.
Uno de ellos es la falta de titanio ruso, un metal indispensable para la industria aeronáutica (casi la mitad de este metal a nivel mundial se utiliza en el sector aeroespacial) y para empresas del calibre de Airbus y Boeing. No en vano, recientemente, la Unión Europea (UE) canceló sus planes de sanciones contra la rusa VSMPO-Avisma, el mayor productor de titanio del mundo.
¿Por qué es tan importante la esponja de titanio?
Aunque el titanio es un metal raro, los minerales que lo contienen (ilmenita y rutilo) están disponibles en muchos países. Sin embargo, la capacidad de transformarlos en su forma más pura, la esponja de titanio, es muy limitada. Y es precisamente la esponja de titanio la que se utiliza para producir aleaciones para uso industrial.
Según el Servicio Geológico de EE. UU. (USGS), Rusia produce alrededor de una quinta parte de los suministros mundiales, ocupando el tercer lugar detrás de China y Japón. Volviendo en cambio al gigante del titanio VSMPO-Avisma, hay que considerar que actualmente abastece cerca de la mitad de las necesidades de titanio de la europea Airbus, que sigue comprándolo a través de sucursales no autorizadas. Por el contrario, EE.UU. Boeing está tratando de alejarse de él.
Fabricantes de aviones sin motores
Aún hoy, la producción comienza a tener serios problemas. Raytheon, una compañía aeroespacial y militar estadounidense, dijo que varios fabricantes de aviones corporativos se quedarán sin motores. Además, en julio, Moscú impidió que un exportador ruso de titanio vendiera a una importante empresa aeroespacial occidental.
Según el Wall Street Journal, por más dañino que fuera para VSMPO-Avisma, Putin podría bloquear todas las exportaciones de titanio en cualquier momento, redirigiéndolas a China como lo hizo con el petróleo. Aunque Rusia obtendría menores ingresos, las últimas cifras publicadas sobre el presupuesto del país muestran que tiene más divisas de las que puede gastar. De hecho, experimentó un aumento del 20% en las exportaciones y una disminución del 22% en las importaciones en comparación con 2021.
Si bien toda la atención de Occidente se centra en los esfuerzos para encontrar nuevos suministros de gas y petróleo, olvidamos que las vulnerabilidades de nuestro sistema son mucho más amplias y, en muchos casos, críticas. El titanio es uno de ellos y pronto nos daremos cuenta.
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