Rusia controla el litio ucraniano: un duro golpe para el futuro energético de la UE

Los rusos se han apoderado de dos de los cuatro yacimientos de litio de Ucrania, comprometiendo el acceso de Europa a materias primas esenciales para la energía verde.

La guerra en Ucrania, que comenzó en 2022, no solo ha devastado ciudades y vidas humanas, sino que también ha alterado el equilibrio de los recursos naturales clave para el futuro económico y tecnológico de la región. Entre ellos, el litio, conocido como el «oro blanco» por su importancia en la transición energética global, representa uno de los activos más valiosos de Kiev y, ahora, está parcialmente bajo control ruso.

Un duro golpe a las ambiciones mineras de la Unión Europea

Rusia ha tomado posesión de dos de los cuatro principales yacimientos de litio de Ucrania. El último golpe se dio el 11 de enero, cuando las fuerzas rusas declararon haber tomado el control de Shevchenko, un asentamiento rural en la región oriental de Donetsk. Esta área alberga uno de los depósitos de litio más grandes del país, con unas 500.000 toneladas de reservas sin explotar, según estimaciones geológicas. Este yacimiento está catalogado como uno de los mayores de Europa.

Expertos advierten que la pérdida de estos depósitos podría tener consecuencias significativas para el resto del continente. El litio es un componente esencial en las baterías utilizadas en smartphone, laptop y vehículos eléctricos, desempeñando un papel crucial en los esfuerzos de la Unión Europea (UE) por reducir su dependencia de los combustibles fósiles y avanzar hacia una energía más verde.

No solo litio, sino también hierro y tierras raras

Rod Schoonover, experto en seguridad nacional y fundador del grupo estadounidense Ecological Futures Group, señala que, aunque el control del litio ucraniano probablemente no fue uno de los objetivos principales de Moscú, la riqueza minera de Ucrania aumenta su importancia estratégica a ojos del Kremlin. Rusia, por su parte, ya cuenta con reservas significativas de litio y otros minerales críticos.

La clave de esta riqueza se encuentra en el Escudo Ucraniano, una vasta formación geológica que atraviesa el centro y sur de Ucrania. Este antiguo estrato rocoso contiene no solo litio, sino también hierro y tierras raras, lo que convierte al país en un actor potencialmente fundamental dentro de la cadena de suministro global de materias primas críticas.

Un duro golpe para las pretensiones europeas sobre los recursos naturales de Ucrania


La guerra ha interrumpido cualquier progreso en la explotación de estos recursos, pero los expertos coinciden en que los yacimientos de litio de Ucrania podrían, o podrían haber llegado a ser, la base de la autonomía estratégica europea en cuanto a minerales críticos. La UE ha tratado de diversificar sus fuentes de suministro, reduciendo su dependencia de países como China. En este contexto, la proximidad geográfica y la riqueza minera de Ucrania la convierten en un socio ideal.

La conquista de Shevchenko es solo el último capítulo de una guerra que no se trata únicamente de territorios y geopolítica, sino también del control de los recursos necesarios para el futuro. Mientras Europa sigue impulsando la transición hacia una energía sostenible, la pérdida de las reservas ucranianas podría suponer un freno significativo a sus planes.

En un mundo donde el litio se está convirtiendo en el nuevo petróleo, la batalla por el «oro blanco» podría redefinir no solo el conflicto en Ucrania, sino también el panorama energético global durante las próximas décadas.

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