La tormenta del fallido banco SVB de Silicon Valley también ha engullido al Signature Bank con sede en Nueva York. Los mercados financieros temen el contagio y los activos refugio como el oro están ganando. Sin embargo, los precios del metal amarillo no logran despegar y oscilan en torno a los 1.900 dólares.
Fueron las palabras del presidente estadounidense Joe Biden las que frenaron el oro y calmaron los mercados. De hecho, el gobierno de EE.UU. intervendrá en las quiebras bancarias, garantizando la integridad de los depósitos.
En máximos de 5 semanas
Sin embargo, los precios del oro aún se encuentran en un máximo de cinco semanas, después de que el mercado apenas unos días antes comenzara a descontar las malas noticias de que la Federal Reserve americana (FED) aumentaría las tasas de interés en 50 puntos básicos en sus próximas dos reuniones.
El default de Silicon Valley Bank (SVB) es la quiebra bancaria más grande desde la Gran Crisis Financiera de 2008. A medida que se extendieron los riesgos de contagio, los reguladores de EE.UU. actuaron rápidamente para estabilizar los mercados y tranquilizar a los consumidores nerviosos. La Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC) y la Federal Reserve han confirmado que los depositantes de SVB y Signature Bank estarán protegidos.
Se avecinan graves riesgos sistémicos
Pero muchos analistas advierten que lo que está sucediendo podría ser el comienzo de una crisis dominó a punto de golpear la economía global. De hecho, estas son las consecuencias de una política monetaria demasiado agresiva por parte de la FED y otros bancos centrales que empiezan a pesar sobre los mercados financieros.
Según TD Securities, si bien las consecuencias sobre SVB y otros bancos más pequeños pueden contenerse, se avecinan riesgos sistémicos mucho más preocupantes. En algún momento, la Fed tendrá que dar marcha atrás para no poner a todo el sistema bancario en crisis y no se logrará el objetivo de controlar la inflación.
Como resultado, en el entorno actual de creciente incertidumbre, muchos analistas piensan que los eventos de estos días podrían ser solo el comienzo de una carrera por el oro, ya que los inversores buscan activos seguros para proteger sus ahorros.
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