La palabra que mejor resume el repunte económico de China (+2,3% del PIB en 2020) es solo una: ¡impresionante!
La construcción de nuevas líneas ferroviarias de alta velocidad a ciudades provinciales más pequeñas y nuevas carreteras que unen ciudades remotas dejadas atrás en planes de desarrollo anteriores han arrastrado la recuperación. El sector inmobiliario también se ha disparado a medida que la demanda del exterior ha impulsado la fabricación, con los productos electrónicos a la vanguardia.
Lo más probable es que, a largo plazo, el aumento de la deuda y la centralidad de la producción sobre el consumo interno no beneficien a China. Sin embargo, por ahora, la economía está en auge y, al menos durante el primer semestre de 2021, el crecimiento continuará.
Las importaciones de cobre están creciendo
La electrificación ferroviaria y la fabricación electrónica significan cobre. Por lo tanto, las importaciones de metal rojo en China han aumentado drásticamente.
En 2020, China logró volúmenes record de importaciones de cobre en bruto y productos semiacabados. Las importaciones ascendieron a 6,68 millones de toneladas, un aumento de un tercio con respecto a 2019 (datos oficiales de la Administración General de Aduanas).
La fuerte demanda china ha ayudado a mantener el impulso alcista de los precios mundiales del cobre. Desde los mínimos alcanzados en la primavera de 2020, los precios han alcanzado los niveles actuales de 8.051 dólares por tonelada en la London Metal Exchange (21 de enero).
Producción récord de acero
A pesar del menor crecimiento económico del resto del mundo y las trabas de un alto precio del aluminio SHFE en comparación con la LME, China ha sido protagonista de fuertes exportaciones de aluminio en bruto y derivados. Sin embargo, los niveles interanuales disminuyeron un 4,6% como reflejo de la debilidad de los mercados extranjeros.
Pero el protagonista absoluto fue el sector del acero, con una producción record y una buena rentabilidad. Según el Financial Times, las importaciones de mineral de hierro aumentaron a 1,17 mil millones de toneladas en 2020.
También es interesante el caso del superávit comercial con Estados Unidos, donde Donald Trump había declarado que quería negarle a China la entrada de muchos bienes. De hecho, el surplus comercial alcanzó su nivel más alto desde 2015 alcanzando 535,03 mil millones de dólares.
Si bien las continuas oleadas de infecciones están deprimiendo a otras economías del mundo, lo que tiene como resultado un impacto en la demanda interna, se espera que el crecimiento económico en China continúe en la primera mitad de este año. Las previsiones indican un crecimiento del 7,8% en 2021, concentrado en gran medida en la primera mitad del año.
Pero ten cuidado. Muchos analistas creen que los metales básicos comenzarán a desacelerarse en la segunda mitad, con una desaceleración de la demanda y una recuperación de la oferta.
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