2020 fue muy positivo para la plata. De hecho, el metal blanco ha ganado más del 30 por ciento desde principios de año.
Los inversores lo buscaron como un activo de refugio seguro durante la primera ola de la pandemia de coronavirus, y los compradores industriales comenzaron a comprarlo en los meses de verano. En agosto, los precios alcanzaron sus máximos de 11 años a 28,32 dólares la onza.
Más rendimiento que el oro
En el transcurso de este año, la plata mostró toda su volatilidad y su capacidad para superar incluso al oro. En resumen, en un período de turbulencia económica ha negado que sea solo el oro de los pobres.
Los precios saltaron de un mínimo de 11,59 dólares a un máximo de 28,32 dólares, lo que como porcentaje significa un impresionante crecimiento del 137 por ciento. Por otro lado, el oro registró un más modesto +38 por ciento. La relación oro/plata también viajó en una montaña rusa. En marzo fue de 126:1 y luego bajó a 69:1 en agosto.
Obviamente, el principal factor que empujó los precios al alza fue el COVID-19, con sus efectos en los mercados y la economía global.
Además, ha habido un fuerte crecimiento en ETP (Exchange-Traded Product), especialmente en noviembre. El ETP registró entradas de 326 millones de onzas en 2020, lo que eleva las tenencias totales a más de mil millones de onzas, un nivel nunca antes alcanzado.
Precios: previsiones positivas
Según Metals Focus, una consultora con sede en Londres, el precio de la plata cerrará el año con un aumento del 27%, alcanzando un promedio de 20,60 dólares, que sería el promedio anual más alto desde 2013.
Muchos analistas esperan que la plata se eleve por encima del nivel crucial de 30 dólares por onza el próximo año, con target realistas de 35 dólares o 37 dólares. Pero en las próximas semanas, como es habitual, publicaremos las previsiones de los analistas más autorizados sobre los precios de la plata para 2021.
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