¡Nadie lo había hecho antes! China tiene el reactor de torio que transforma la fisión

Los científicos chinos han logrado convertir el torio-232 en uranio-233 dentro de un reactor experimental de sales fundidas de torio, validando la viabilidad técnica del ciclo del combustible de torio.

En un laboratorio experimental enclavado en el desierto de Gobi, China ha marcado un hito que podría cambiar el futuro de la energía nuclear. Un grupo de científicos del Shanghai Institute of Applied Physics, perteneciente a la Academia China de Ciencias, anunció que por primera vez en el mundo ha conseguido la conversión del torio en uranio dentro de un reactor de sales fundidas.

El éxito, obtenido seis meses después de haber cargado nuevo combustible en el reactor experimental, demuestra la viabilidad técnica del ciclo del combustible de torio y proyecta a Pekín a la cabeza de la carrera global hacia la próxima generación de reactores nucleares.

“Quemar mientras genera”: un ciclo autosuficiente

La clave del resultado reside en la capacidad del torio-232 de capturar neutrones y transformarse en uranio-233, un isótopo fisionable que alimenta la reacción en cadena. Este proceso crea un ciclo “burn while breeding”, es decir, un sistema que produce su propia reserva de combustible mientras genera energía.
El reactor de sales fundidas, definido como una tecnología de cuarta generación, utiliza sales fundidas a alta temperatura como fluido de refrigeración, eliminando la necesidad de agua y reduciendo los riesgos de fusión del núcleo o de explosiones por presión.

Según Dai Zhimin, director del instituto, este tipo de reactor “ofrece seguridad intrínseca, funcionamiento a baja presión y alta eficiencia térmica”, características que lo convierten en el candidato ideal para aprovechar los enormes recursos de torio disponibles en el país.

Torio: el oro invisible de la energía china

El torio, un elemento aproximadamente tres veces más abundante que el uranio, no es directamente fisionable y no puede ser utilizado con fines militares. Por eso se considera un combustible limpio y no proliferante.

En China, donde los recursos de torio son enormes, se estima que las reservas podrían sostener la demanda energética nacional durante decenas de miles de años. Una investigación publicada recientemente, basada en estudios geológicos realizados en Mongolia Interior, estima que solo los residuos de cinco años de extracción de una única mina de hierro contienen suficiente torio para alimentar los hogares estadounidenses durante más de un milenio.
En el distrito minero de Bayan Obo, el potencial estimado de torio alcanzaría el millón de toneladas, una cantidad suficiente, según algunos científicos locales, para garantizar energía a China durante 60.000 años.

Hacia la comercialización para 2035

El éxito experimental aún no representa el punto de inflexión definitivo, pero constituye un paso decisivo hacia el objetivo declarado de Pekín: construir para 2035 un prototipo de 100 megavatios térmicos y, posteriormente, iniciar la producción a escala comercial.

Todos los componentes clave del reactor han sido fabricados internamente, signo de la voluntad de desarrollar una cadena industrial autónoma para la tecnología del torio. Como subrayó Dai Zhimin, el proyecto “acelera la innovación tecnológica y la transformación ingenieril, ofreciendo a China una solución energética segura, fiable y completamente bajo control nacional”.

La carrera global por el reactor del futuro

Con el único reactor de sales fundidas operativo en el mundo, China consolida su posición de leadership en el sector de la fisión avanzada. Mientras muchos países se centran en la fusión nuclear o en pequeños reactores modulares, Pekín apuesta por una vía menos explorada pero potencialmente revolucionaria: la del torio.

Si la tecnología demuestra su sostenibilidad y seguridad también a escala industrial, podría abrir una nueva era para la energía nuclear: más limpia, más segura y, quizá, virtualmente inagotable.

METALLIRARI.COM © ALL RIGHTS RESERVED

** Los comentarios están deshabilitados. Puede comentar los artículos en nuestras páginas sociales en FACEBOOK, TWITTER