La producción mundial de aluminio aumentó durante el mes de julio. 5,75 millones de toneladas en julio frente a 5,57 millones de toneladas en junio, según lo informado por el International Aluminium Institute (IAI).
La producción china está creciendo, pero también las importaciones
Naturalmente, en lo que respecta a la producción de aluminio, pensamos en China, el mayor productor y consumidor del mundo. El gigante asiático produjo alrededor de 3,34 millones de toneladas en julio, más de 3,24 millones de toneladas en junio y 3,12 millones de toneladas producidas en julio de 2020. Además, el país importó 469.030 toneladas de aluminio en bruto y productos de aluminio, esta cifra también aumentó de 454.397,4 toneladas en Junio. Mientras tanto, las exportaciones totalizaron 3,09 millones de toneladas (+ 12,7% interanual).
Pero son precisamente las importaciones chinas, que aumentaron un 37,1% interanual, las que han creado las condiciones ideales para una subida de los precios de los metales. Esto también explica el deficit mundial de aluminio que, según la World Bureau of Metal Statistics, alcanzó alrededor de un millón de toneladas en el período enero-junio de 2021.
Podemos decir que incluso si la producción crece, por el momento es incapaz de mantenerse al día con la demanda.
Precios a un máximo de 13 años
En Shanghai, los precios del aluminio subieron a un máximo de 13 años como resultado del anuncio del recorte de producción de las fundiciones de aluminio en Xinjiang. Esta no es una región cualquiera, sino un área con una gran concentración de fundiciones, que representan casi una quinta parte de los suministros de China.
El recorte fue impuesto por las autoridades locales para intentar eliminar la producción ilegal y reducir las emisiones contaminantes. Según Reuters, en las cinco fundiciones involucradas, los límites mensuales representan una reducción del 10% en la producción respecto a los niveles de los primeros siete meses de este año.
Casi se podría decir que los precios del aluminio continúan a merced de los numerosos gobiernos regionales chinos. Cuando uno de ellos decide limitar algunas fundiciones, los consumidores del otro lado del mundo se ven penalizados por nuevos aumentos de precios o se quedan sin aluminio.
¡En estos días, incluso en la industria del aluminio, “el aleteo de una mariposa puede causar un huracán en el otro lado del mundo”!
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